Importancia de la fisioterapia en la tercera edad
A continuación te explicaremos por qué la fisioterapia en la tercera edad es sumamente importante para disfrutar de una vejez activa y vital. Durante la etapa de envejecimiento empiezan la aparición de dolores crónicos en diferentes partes del cuerpo. Como son los dolores en la cadera por artrosis, en la rodilla, espalda entre otros debido al desgaste de los cartílagos y la perdida de calidad de los tendones. Al perder la elasticidad los tendones se generan contracturas con más facilidad lo cual provoca dolor.
Al envejecer las personas pierden la capacidad de movimiento y flexibilidad con el paso del tiempo.
Fisioterapia en la tercera edad para contrarrestar las dolencias
Hay varios factores que nos pueden ayudar a aliviar los dolores crónicos. Una de las claves para tener calidad de vida y una vejez activa son las sesiones de fisioterapia en la tercera edad. Entre los beneficios que nos pueden aportar son:
- La disminución del dolor
- Mejora del equilibrio y funcionalidad articular
- Recuperación de la fuerza muscular
- Aumentar la flexibilidad
- Mejora de la capacidad de movimiento
Todos estos factores nos ayudan a mejorar el estado físico, también intervienen en la química del cerebro, propiciando cambios positivos en el estado de ánimo del paciente. Además el anciano nota una mejora en su autoestima al sentirse más capacitado para actividad diaria.
En la tercera edad es clave mantener un buen estado de ánimo que haga que el paciente se sienta más joven y activo. Para eso hay que evitar que el paciente sufra dolores y perdida de autonomía.
Hacer deporte en la tercera edad
Hacer deporte de manera frecuente ayuda al anciano a mantener las articulaciones con flexibilidad gracias al movimiento.
Se recomienda salir a caminar por el bosque ya que está demostrado que practicar deporte en la naturaleza nos reporta numerosos beneficios. Practicar natación de manera asidua, al nadar no hay impacto sobre las articulaciones y minimiza el riesgo de lesión. Al mismo tiempo se consigue mitigar las patologías de espalda como la cervicalgia, lumbalgia y dorsalgia. Ir en bicicleta también es muy beneficioso para las articulaciones y tiene muy poco riesgo de lesión.
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